Sociedad Un casco inglés manchado de sangre y la nobleza de un militar argentino que no descansó hasta encontrar a la familia de su antiguo enemigo para devolverlo Diego Arreseigor era teniente en Malvinas. Quedó prisionero y tuvo que levantar las minas de los campos. Allí halló el casco de un inglés. Lo guardó durante 37 años como trofeo de guerra, hasta que supo que su dueño había muerto en la batalla de Monte Longdon. Este es el conmovedor encuentro con la hermana del caído