10 may 2023
Grigory Kessel, investigador de la Academia Austríaca de Ciencias, anunció un histórico descubrimiento a través de un artículo publicado en la revista New Testament Studies. Su equipo encontró un fragmento oculto que podría revelar el origen de la Biblia.
Se trata de una de las ediciones más antiguas del Nuevo Testamento, el cual contiene versículos del Evangelio de Mateo con detalles jamás vistos.
Este enigmático descubrimiento, enmascarado en un antiguo libro guardado entre los archivos del Vaticano, revela sorprendentes diferencias en el Evangelio.
"Este versículo está oculto en el sentido de que, a principios del siglo VI, la copia en pergamino del Libro de los Evangelios fue reutilizada dos veces. Ahora, en la misma página se pueden encontrar hasta tres capas de escritura en diferentes idiomas", explicó Kessel.
Según el investigador, esta antigua traducción al siríaco plantea interrogantes sobre el origen de la Biblia. Además, señaló que "sugiere una conexión con el norte del Imperio Persa, que practicaba zoroastrismo".
Según Christoph Marckchies, profesor de Cristianismo Antiguo en la Universidad de Humboldt de Berlín, este descubrimiento es sumamente importante para la comprensión del Catolicismo Apostólico Romano.
"Los evangelios del Nuevo Testamento se remontan, aproximadamente, al año 70 después de Cristo y los manuscritos más antiguos conocidos son los papiros de la primera mitad del siglo II encontrados en Egipto", explicó.
Además, aclaró que la mayoría de los fragmentos están escritos en griego. Por esta razón, la aparición del siríaco se convierte en objeto de estudio e investigación.
La relevancia de este hallazgo radica en su potencial para comprender los orígenes y la evolución de la fe, ya que arroja luz sobre los primeros siglos del cristianismo y desafía nuestra comprensión actual de la religión.
Fuente: El Cronista