“El 80% de los cánceres de mama se cura”, entrevista a la Dra. Margossian

Cada 19 de octubre se celebra el Día Mundial del Cáncer de Mama, una jornada destinada a la concientización sobre esta enfermedad que es hoy el tipo de cáncer más frecuente. Si bien los índices de mortalidad por esta enfermedad han disminuido en las últimas décadas, el cáncer de mama sigue siendo la segunda causa de muerte por cáncer en el mundo y puede afectar a mujeres (aunque también a hombres) de cualquier edad.

 

En ARGENTINA ONLINE entrevistamos a la reconocida mastóloga Dra. Astrid Margossian, MD, PhD, cirujana y especialista itinerante de Clínica San Jorge, quien destacó la importancia de los chequeos tempranos.

 

“La mejor prevención es detectarlo a tiempo, cuando es muy inicial”, explicó. “Y la mejor manera de hacerlo es por medio de una mamografía por año sin tener ningún síntoma”. 

 

La detección precoz es clave para el buen pronóstico del cáncer y el mejor instrumento para llevar a cabo esa detección es la mamografía. La Dra. Margossian es terminante con respecto a ciertos métodos del pasado, como aquellas campañas de los años setenta que recomendaban el “autoexamen” como manera de prevención. “El autochequeo es un concepto antiguo. Buscamos nódulos que no pueden palparse, entonces el autoexamen no los va a detectar”.

 

La indicación es clara: una mamografía a partir de los 35 años en mujeres sanas. Es decir, toda mujer que no haya tenido nódulos de mama, que no haya tenido cáncer de mama y que no tenga o haya tenido familiares jóvenes con cáncer de mama, ya que en todos estos casos, al haber especial riesgo, hay que empezar a hacerse chequeos antes de los 35.

 

Hoy en día, los pronósticos suelen ser optimistas. “La gran mayoría de los cánceres de mama se curan”, explica la Dra. Margossian, que además de atender en la Clínica San Jorge de Ushuaia es directora del Breast Center Institute y del banco de tumores Biobank. “Este tipo de cáncer ha devenido una enfermedad crónica, ya que la mortalidad ha disminuido considerablemente desde los años noventa en adelante”. Principalmente gracias al aumento de mamografías y el uso del Tamoxifeno.  

 

“El hecho de hacer una mamografía por año hace que lo encontremos más temprano y por eso las mujeres no se mueren porque se encuentran tumores muy pequeños”, explica la Dra. Margossian. El Tamoxifeno, por otra parte, es “una pastilla que toman las mujeres que tienen cáncer de mama y gracias a la cual bajó drásticamente la mortalidad. Es una droga que se usa desde los años 70 pero es tan buena que ahora también se está usando para prevención en mujeres que todavía no tienen cáncer de mama pero tienen alto riesgo. Está probado que disminuye el 50% del riesgo del cáncer de mama”.